Para comprender la vinculación entre el
nacimiento de Jesús y las festividades de la Tierra tenemos que tener claro que
el mito es un mito invernal, vinculado al solsticio de invierno en el
hemisferio norte. En el momento más frío del invierno, cuando la vida parece
extinguida y la luz ha sido derrotada por la oscuridad; cada diciembre nace del
vientre de una madre virgen que no conoce varón, un bebito que será el rey del
universo. Este pequeño soberano es el sol nacido en cada solsticio invernal,
que hará a partir de entonces más largos los días y hará que la vida retorne.
Este texto de Francisca Martín-Cano nos ayuda a comprender este arquetipo. LEER MÁS