Texto de Rosa María Roffiel: "Mi
vulva es una flor, es una concha, un higo, un terciopelo está llena de aromas,
sabores y rincones, es color de rosa, suave, íntima, carnosa.
A mis 12 años le broto pelusa, una nube de algodón entre mis
muslos, siente, vibra, sangra, se enoja, se moja, palpita, me habla, guarda
celosa entre sus pliegues el centro exacto de mi cosmos, luna diminuta que se
inflama, ola que conduce a otro universo.
Cada 25 días se torna roja, estalla, grita, entonces, la aprieto
con mis manos le digo palabras de amor en voz muy baja, es mi segunda boca, mis
cuatro labios.
Es traviesa, retoza, chorrea, me empapa, le gustan las lenguas que
se creen mariposas los penes solidarios, la pulpa de ciruela femenina, o
simplemente las caricias venidas de mi misma.
Es pantera, gacela,
conejo, se ofrece coqueta si la miman, se cierra violenta si la ofenden. Es mi
cómplice, es mi amiga, una eterna sonrisa de mujer complacida."