- Dios creó a la mujer y de
ella nació el hombre.
- Sí, lo de Adán y Eva va al revés. En la naturaleza
el esquema por defecto es hembra. A las ocho semanas de gestación una gran
cantidad de testosterona convierte el cerebro femenino en masculino.
- A usted, ¿qué le ha
sorprendido de su cerebro femenino?
- Yo pasé tres años investigando sobre lo femenino
en diez áreas especializadas diferentes. El problema es que los científicos
vivimos en silos paralelos y no nos hablamos ni nos leemos de un silo a otro.
Yo, por ejemplo, no sabía que el cerebro de la mujer se encoge durante el
embarazo. Fue un shock. LEER MÁS